La innovación en la educación en Honduras va más allá de la tecnología
El día miércoles 20 de octubre, se llevó a cabo un panel virtual titulado “Educación en Honduras: Innovación y soluciones durante la pandemia”, contando con la presencia de Elisabeth Maigler, Coordinadora de Proyectos de la Fundación Naumann para la Libertad en Centroamérica, Marissa Krienert, coordinadora del Eje de Educación de la Alianza para Centroamérica, así como con el Padre Víctor Manuel Cortés, Fundador y Director de la Escuela Mercedes Calderón ubicada en Santa Cruz de Yojoa en el departamento de Cortés y Michelle Fontecha, Directora de País para Glasswing International, ambos integrantes del panel virtual que sería el centro del evento.
Después de las palabras de bienvenida por parte de Elisabeth Maigler, se procedió a la introducción del Eje de Educación de la Alianza para Centroamérica por parte de Marissa Krienert quien destacó la importancia para la región que tiene el trabajo y reportes que realiza este eje conformado por representantes de organizaciones civiles de todos los países de la subregión latinoamericana.
Posteriormente se dio paso al panel moderado por Elena Toledo, directora de Fundación Eléutera. Ambos panelistas presentaban sus soluciones respecto a un retorno seguro en clases tomando en cuenta las medidas de bioseguridad contra el COVID-19 y las medidas aplicadas al principio de la pandemia. El volver a clases es importante ya que según datos de la Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán, son 800 mil niños, niñas y adolescentes en deserción escolar, una cifra altísima más que la pronosticada para el año 2020 por parte de la Secretaría de Educación, que era alrededor de 400 mil niños en deserción. “Tenemos actualmente 2 millones de niños fuera del sistema educativo”, indicó Fontecha.
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La Escuela Mercedes Calderón ha llegado a ser un ejemplo para otras escuelas de innovación y como el retorno seguro es posible sin importar las restricciones de infraestructura, mediante la aplicación de varios métodos educativos que el padre Víctor Cortés hace funcionar en la escuela como el método activo-productivo de Pestalozzi, una educación para la libertad de Freire y el niño como actor en el proceso educativo, método de Montessori. “Hay momentos donde hay que tomar la actitud y hacer nuestra la responsabilidad de poder enseñar y dar los recursos necesarios a los niños aunque no se cuente con el apoyo del gobierno” expresó el Padre Víctor.
Mientras que Glasswing International no hace intervención directa en la educación, pero sí busca las maneras de mantener en las escuelas a los niños y jóvenes a través de programas extracurriculares donde fortalecen las habilidades para la vida, voluntariado comunitario y reforzamiento escolar para mantener niveles adecuados en sus grados; además apoyan con recargas digitales para que los niños se puedan conectar a las clases.
“Todos somos víctimas del COVID-19, al corto plazo, los maestros como niños sin importar el estrato social están sufriendo esta virtualidad (…), hay que dar apoyo no sólo en lo económico, sino también lo referente a la salud mental”, comentaba Michelle Fontecha.
La salud mental fue otro enfoque tomado en este panel, la enseñanza de habilidades socioemocionales y la resiliencia son puntos a reforzar en la educación, fortalecer las capacidades de las instituciones que están a cargo de la educación de los niños. Ellos estaban de acuerdo en que la salud mental es importante atenderla, el hecho de regresar a clases es el proceso de generar más socialización, que los niños regresen a la alegría y entusiasmo.
Actualmente desarrollando una pasantía en investigación en Fundación Eléutera
- La innovación en la educación en Honduras va más allá de la tecnología - October 22, 2021
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